He llegado a un punto (que no sé si será común a todo opositor) en el que la oposición es LO ÚNICO. No sé si voy a saber explicarlo bien, pero lo voy a intentar. Parece como si estos meses que llevo tras tomar una decisión súper difícil (dejar el trabajo para estudiar) hubiesen servido para ir desconectándome poco a poco de mi vida anterior. Además de ello y ,como para ponerme a prueba en día precante, me llaman para ofrecerme un trabajo tres días por semana en horario de mañana (¡qué cosas!). Evidentemente he declinado la oferta amablemente. Cuando digo que la oposición es LO ÚNICO es porque día a día evoluciono hacia un mundo sólo imaginado por mi, en el que sólo importa que el siguiente cante salga bien (y si puede ser mejor que el anterior) y en el que busco formas de leer más y más artículos sobre posibles temas para el primer examen. Obviamente el tiempo y las fuerzas son finitas por lo que he ido eliminando actividades de mi día a día. ANTES, dedicaba una mañana del fin de sema